Reflexiones de los últimos días
Los problemas están para tratar de solucionarlos y seguir adelante, así llevo ya dos semanas. o Vamos a ver si consigo retomar el ritmo del blog, compartiendo como siempre mis impresiones y la información que atrae mi atención.
Lo que me hace reflexionar, y mucho, es que hace tres días hizo un año de la creación de este blog. Y, sinceramente, no creí que fuera a dedicarle tanto tiempo, aunque veo que efectivamente, se cumplieron mis expectativas. El blog nació de un modo un tanto precipitado. El nombre era un guiño a mis amigos del Hábitat del Unicornio y el sentido de su creación fue felicitar un cumpleaños. Mañana otra vez cumple Odita y le pondré otra flor. Pero una vez creado el blog, tuve que hacer el intento de usarlo para indagar si efectivamente, este tipo de herramienta sirve para hacer mejor a la gente, más completa, más informada, más plena de ideas...
La conclusión es que efectivamente, lo es. El blog me ha permitido aprender mucho, ha consolidado conocimientos, he encontrado nuevos y he coincidido con gente muy interesante. Por ejemplo me permitió conocer a la gente de Ciberpunk, a la que descubrí siguiendo los magníficos contenidos de sus blogs, pero también a muchos blogger más individualistas que se esfuerzan en crear y trasmitir algo distinto a frivolidades.
El tema de la estimulación intelectual ha sido recurrente en este tiempo. Era algo que me interesaba especialmente, pues una disposición tan grande de información como la que tenemos en Internet, y un acceso directo a las ideas de otras personas, debía servir en efecto para formar una mente con más criterio, más crítica. Todos esos post que escribí, incluidos los que exaltaban el esfuerzo, eran derivados de descubrimientos personales, iban dirigidos a mí mientras me analizaba nuevas costumbres que podía adquirir para mejorar.
Esto es lo bueno de contar con un blog personal, que te ayuda a crecer. Este es un blog dirigido a mí mismo y a mis amigos. También expongo todo aquello que me resulta ofensivo en la sociedad. Me indigna el modo subrepticio en el que los derechos van siendo minados y volvemos de nuevo a las sociedades productivas, en el que el ciudadano no es persona, sino una hormiga obrera más que trabaja en un mundo controlado por otros, es decir, al estilo de la actual China o EEUU.
Deberíamos usar Internet para evitar esto, para mantener una vida digna para todos, compartiendo conocimiento y cultura, criticando los intentos de los poderosos de ir minando la calidad de nuestra vida en su beneficio o cómo intentan distorsionar nuestra percepción de la vida para que necesitemos gastar a toda costa o aceptar sus decisiones. Internet debería hacernos libres y para ello hemos de huir de toda centralización en la información, como siempre han propuesto los medios de comunicación tradicionales, o ahora las grandes empresas como Google. Y habría que exigir a las nuevas tendencias de la web 2.0, que partan con las suficientes garantías de privacidad y seguridad.
Estos días, busco datos sobre esa sentada por la vivienda digna que se acerca y aunque parte con fuerza, no parece plantear objetivos a posteriori, no hay una estrategia a seguir para detener la especulación con el suelo y el ladrillo que está condenando a los jóvenes a hipotecar tempranamente su futuro. Cada vez que un joven firma su hipoteca, cae en un foso del que le costará décadas salir, minando sus posibilidades de crear él mismo un trabajo que le dignifique o formar una familia. Casi parece una nueva forma de esclavitud promovida por la economía en general. Quizá, como esta nueva forma de sumisión no está dirigida por alguien en concreto sino a todo un complejo social que la favorece: ayuntamientos, bancos, empresarios, especuladores, nosotros mismos creyendo que estamos invirtiendo, etc... no nos demos cuenta de la grave carga que nos supone. Pero trabajar décadas por 80 metros cuadrados construidos en un edificio es un despropósito sin sentido, es una de esas deudas desmedidas que te lacran y obligan a trabajar sin importar las condiciones o el destinatario real del beneficio de tu esfuerzo. Todos tenemos derecho a una vivienda digna, pero que no entorpezca nuestro crecimiento profesional y personal futuro. Esa sentada va siendo necesaria, pero también toda crítica y lucha contra la especulación o beneficio desmedido por parte de unos pocos. Este tipo de actividades son las que deberían estar controladas de mil modos distintos.
Finalmente, también tengo que escribir algo sobre el tema de Bielorrusia, que comencé a seguir porque parece el declive de la libertad de una ciudadanía. Las garantías democráticas van desapareciendo poco a poco, mientras los ciudadanos creen que su situación mejora. Milinkevich está ahora mismo en prisión, igual que otros opositores y líderes de movimientos de resistencia. Arnau lo escribe en su blog:
Tras la manifestación pacífica en recuerdo de la tragedia de Chernobyl, el sistema judicial bielorruso (no confundir con la justicia bielorrusa) ha detenido a Aleksandr Milinkevich por organizar manifestaciones ilegales y le ha sentenciado a 15 días de arresto.
Con las elecciones ganadas, pero todos los líderes opositores a la prisión (Kazoulin lleva encarcelado un mes, Nikita Sasim, líder de Zubr y hoy Milinkevich), Lukashenko empieza a mostrar lo que Milinkevich define como esquizofrenia política.
La página de Zubr ha dejado de mostrar contenidos y llama a la unidad de la gente disconforme con la situación de su país.
Es una nueva dictadura en un país estratégico dentro del marco de la energía mundial, un escenario en que las grandes potencias tratan de influir: Europa, EEUU, Rusia... y los ciudadanos simplemente, observamos.
3 comentarios
Gatopardo -
Ven corriendo.
Besicos
Antonio P. -
Zuriñe -